La tendencia de contratar a profesionales jóvenes y menos experimentados se ve impulsada, en gran medida, por la necesidad de reducir costos en un mercado cada vez más competitivo.
Si bien esta estrategia puede generar ahorros inmediatos en términos de salarios, también puede tener consecuencias negativas para la calidad del trabajo y la eficacia de los servicios a sus clientes.
A continuación examinamos la tendencia de contratar jóvenes talentos a expensas de la experiencia y sus implicaciones en la industria de la publicidad y el marketing.
Como señala Sir Martin Sorrell, fundador y ex CEO de WPP, “las agencias están bajo una tremenda presión para reducir costos, lo que les lleva a contratar a personas más jóvenes y pagarles menos” (Sorrell, 2018). Si bien esta estrategia puede generar ahorros inmediatos los que sufren son sus clientes, pues tienen consecuencias a largo plazo en términos de calidad y efectividad y sobre todo en la creación de ecosistemas digitales para las empresas que trabajan. A muchas agencias no les importa.
Además al contratar gente jóven para reducir costos la falta de experiencia y conocimientos sólidos en la industria puede llevar a la creación de campañas de marketing y publicidad que no produzcan los resultados deseados. Como afirma Bob Hoffman, autor y experto en publicidad, “la contratación de jóvenes talentos a expensas de la experiencia puede llevar a una disminución en la calidad del trabajo y, en última instancia, a una menor efectividad en el marketing y la publicidad” (Hoffman, 2019).
La falta de experiencia en la industria puede resultar en una menor comprensión de las necesidades y expectativas del cliente. Matando los planes de las empresas. Según Jeff Rosenblum, cofundador de la agencia Questus y autor de “Friction”, “la contratación de talento joven sin experiencia previa en la industria puede dificultar la capacidad de las agencias para comprender y abordar las necesidades específicas de sus clientes” (Rosenblum, 2017).
Por otro lado, algunos argumentan que contratar jóvenes talentos puede ser beneficioso en términos de creatividad y adaptabilidad, pero no capacitan a sus empleados para que conozcan la importancia de un ecosistema digital.
Como señala el experto en marketing y autor, Seth Godin, “los jóvenes a menudo aportan nuevas ideas y perspectivas frescas que pueden ser valiosas en un mundo de marketing en constante cambio” (Godin, 2020). Sin embargo, es importante equilibrar esta creatividad y adaptabilidad con la experiencia y el conocimiento que proviene de años de trabajo en la industria.
También es fundamental que las agencias no sacrifiquen la calidad del servicio al cliente en un esfuerzo por reducir costos. Al final, el éxito de una las empresas se basa en su capacidad para entregar resultados y satisfacer las necesidades de sus clientes, visión que no comparten las agencias, pues como expertos y gurus del tema terminan matando al ecosistema porque no tienen perfiles que lo entiendan.
David Ogilvy, el legendario publicista y fundador de Ogilvy & Mather, afirmó que “el éxito de una agencia no se basa en cuánto cobra, sino en la calidad del trabajo que produce y en la satisfacción de sus clientes” (Ogilvy, 1983). Y está cita fue ya dicha hace casi 30 años, hoy en día ya no les importa.
Para que las empresas puedan mantenerse competitivas y ofrecer soluciones de alta calidad a sus clientes es tiempo de que busquen verdaderos expertos del tema, o de lo contrario quedarse en el mismo lugar los llevará desaparecer por completo.